Cuando los aliados entraron en Alemania, los responsables del proyecto “Die Glocke” (La Campana Nazi), así como los artefactos, desaparecieron. El General Hans Kammler, el máximo responsable de todos los proyectos secretos desde 1.944, y cabeza visible de “La Campana”, a las órdenes de Martin Bormann y del Führer, desapareció y no se supo nada más de él. El General de la SS Emil Mazuw, era el coordinador y responsable directo del proyecto, desapareció y no se supo nada más de él. El Almirante Rhein, responsable de la Investigación, Desarrollo y Patentes, desapareció y no se supo nada más de él. La Dra. Elisabeth Adler, matemática de la Universidad de Königsberg, participó en el proyecto como experta en matemáticas no convencionales. Desapareció y no se supo nada más de ella. La médium María Orsic también desapareció. ¿Utilizaron “La Campana”, para escapar de las fuerzas aliadas? El III Reich poseía tecnología muy avanzada, de eso no hay duda. Un país, Alemania, puso en jaque a todo un planeta, con un poder armamentístico muy superior a los aliados. Pero no sólo los nazis poseían armas más destructivas que los demás países, sino que poseían información privilegiada de cómo viajar en el tiempo, de vórtices, agujeros de gusano, vida en otros rincones del Universo… y viajaron hasta la Antártida para crear una base.